Bronquitis en niños: Qué es, causas, síntomas, diagnóstico y tratamiento
La mayoría de los padres se asustan al hablar de la bronquitis, y esta situación es entendible, ya que esta enfermedad significa una inflamación de los bronquios de quien la padece, y es un tema especialmente delicado cuando se trata de niños.
Sin embargo, los médicos suelen recomendar a los padres o cuidadores calmarse porque según las conclusiones médicas la bronquitis no es una condición crónica en los niños.
De todos modos, es muy importante que quienes sean responsables de estos adquieran conocimientos sobre esta enfermedad para poder detectarla a tiempo y actuar correctamente.
La bronquitis es un problema del tracto respiratorio inferior que se manifiesta por una inflamación y/o infección de las vías respiratorias, que incluye la tráquea y los tubos de aire que transportan el oxígeno a los pulmones. Hay dos tipos de bronquitis: aguda (a corto plazo) y crónica (a largo plazo).
La bronquitis afecta los bronquios. Estos son tubos en los que el aire pasa a través de ellos dentro y fuera de los pulmones.
El tipo de bronquitis más común en los niños resulta ser la bronquitis aguda. Ya que por lo general la bronquitis crónica aparece a la edad adulta, especialmente en personas que fuman asiduamente y en aquellos que son propensos a inhalar sustancias químicas.
Bronquitis aguda
La bronquitis aguda es más común durante la temporada de invierno, cuando generalmente suele atacar a los niños.
Algunos virus atacan el revestimiento del árbol bronquial, lo que conduce a una infección. La hinchazón aumenta debido a la resistencia del cuerpo ante los virus. Cuando hay más inflamación, se produce más moco.
Si observas que tu hijo tiene secreción nasal, la cual comienza antes que la tos, tiene un poco de fiebre, siente dolor en la espalda y dolor muscular, además tiene dolor de garganta, escalofríos y malestar general, entonces es muy probable que esté padeciendo una bronquitis aguda.
Durante el inicio de la bronquitis aguda, tu hijo tendrá una tos seca que luego se convertirá en una tos abundante llena de moco. Hay momentos en que algunos niños vomitan o sienten náuseas, provocadas por la tos.
Tras la observación de los síntomas antes mencionados, se recomienda que lleves a tu hijo al médico.
La bronquitis aguda se detecta inicialmente mediante la obtención de la historia clínica del niño y la realización de un examen físico. Además, se pueden realizar las siguientes pruebas:
- Análisis de sangre
- Radiografía de tórax
- Exámenes de los pulmones
- Oximetría de pulso
- Cultivos de esputo
Un niño con bronquitis aguda se pondrá bien si hace reposo. Deberá, además, tener una dieta balanceada y beber mucho líquido sin cafeína.
Otro remedio muy útil es la mejora de la humedad dentro del ambiente en el que se encuentra.
Puede suceder que el médico recomiende medicamentos relacionados con el asma. Esto ayudará a la liberación de moco en el interior de los tubos bronquiales. Los medicamentos se encuentran por lo general acompañados con un inhalador.
También se le pueden dar analgésicos al niño para aliviar la fiebre, y el malestar que está sintiendo.
Los padres o cuidadores deben tener cuidado de no dar aspirina a los niños que padecen bronquitis, ya que puede conducir a enfermedades graves como el síndrome de Reye. Además, los antihistamínicos deben evitarse ya que pueden empeorar la tos de tu hijo.
Para que la bronquitis aguda no sea recurrente, se aconseja que le pidas a tu hijo que se lave frecuentemente las manos y lo mantengas alejado del humo de cigarrillo.
Bronquitis crónica
La bronquitis crónica es el segundo tipo de la enfermedad. Por lo general, aparece después de una irritación continua de los tubos bronquiales. Esta bronquitis es “crónica” si los síntomas persisten por más de tres meses.
Los estudios demuestran que hay pocos casos de bronquitis crónica en niños en comparación con la bronquitis aguda. La bronquitis en los niños puede volverse crónica si los síntomas no han sido tratados bien.
La bronquitis crónica es una categoría de EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica).
La EPOC es un problema respiratorio que se desarrolla que a la larga impide que el paciente respire con normalidad, causando dificultad en el esfuerzo físico y que pueda requerir un suministro de oxígeno con regularidad.
La bronquitis debe ser tratada adecuadamente, ya que puede conducir a enfermedades respiratorias graves como la neumonía, enfisemas, insuficiencia cardíaca derecha, o hipertensión pulmonar.
Cuando tu hijo tenga resfriado o tos, lo mejor es buscar ayuda médica de inmediato, porque esto puede llevar a la bronquitis.
Optimizando el Tratamiento de Bronquitis en Niños
Para optimizar el tratamiento de bronquitis en niños, es crucial seguir las indicaciones médicas al pie de la letra. Esto puede incluir:
- Medicación precisa para combatir tanto la causa subyacente (usualmente viral) como los síntomas.
- Incrementar la humedad del ambiente para ayudar a aliviar la congestión y facilitar la respiración.
- Mantener una hidratación adecuada, esencial para la recuperación.
- Evitar la exposición al humo y otros irritantes que puedan exacerbación de los síntomas.
Implementar estos consejos puede contribuir significativamente a una recuperación más pronta y a reducir la posibilidad de complicaciones asociadas a la bronquitis en niños. Recordemos que el tratamiento de bronquitis en niños debe ser supervisado por un profesional de la salud para asegurar su efectividad y ajustarse a las necesidades individuales de cada niño.
Esperamos que te haya gustado este artículo sobre Bronquitis en niños: Qué es, causas, síntomas, diagnóstico y tratamiento.
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